#1
07-04-2020, 12:25 AM
Desde hace años yo alimento a mis peces mediante un comedero automático que echa una porción a mitad de mañana y dos por la tarde. Tiene hojuelas, gránulos, larvas, variedad de comida comercial de distintos tipos. Los fines de semana les doy algún que otra variedad "más exquisita", congelada,... o nada, que de vez en cuanto no les viene mal.
Al estar teletrabajando en casa justo en frente del acuario he podido comprobar lo que ha pasado, ya que me pasó hace algo más de un mes y no le encontraba explicación después de tantos años.
Utilizo un comedero Eheim que está enganchado encima de la tapa por el velcro que trae, no con la pinza, ya que mi acuario está tapado. Pues bien, el comedero tiene como cuatro patitas de espumilla para mantenerse fijo en la posición y una de ellas se despegó, por lo que le puse un trozo de cinta a doble cara. Como ésta es un poco más alta, resulta que el borde del comedero tocaba la tapa y por si fuera poco, al calentador se le ha soltado la rueda y tenía el agua a 3º más de lo habitual, total que el vapor de agua a formado gotas en la parte baja del comedero que han escurrido hasta la cinta de doble cara que se ha juntado en un charquito hasta el borde del agujero de la entrada de comida (puff, espero haberme explicado )
En resumen, los pequeños y lindos colémbolos que suelen pasear por debajo de la tapa han aprovechado la humedad para subir y ¡tachan! descubrir la comida.
Todo esto ocurre de una semana para otra, desaparece toda la comida y se aprecian los restos y las hojuelas agujereadas :
En plena acción:
Podeis imaginaros que a cada giro del comedero lo que soltaba era polvillo y unos cuantos bichos que se zampaban los peces a toda velocidad
Al estar teletrabajando en casa justo en frente del acuario he podido comprobar lo que ha pasado, ya que me pasó hace algo más de un mes y no le encontraba explicación después de tantos años.
Utilizo un comedero Eheim que está enganchado encima de la tapa por el velcro que trae, no con la pinza, ya que mi acuario está tapado. Pues bien, el comedero tiene como cuatro patitas de espumilla para mantenerse fijo en la posición y una de ellas se despegó, por lo que le puse un trozo de cinta a doble cara. Como ésta es un poco más alta, resulta que el borde del comedero tocaba la tapa y por si fuera poco, al calentador se le ha soltado la rueda y tenía el agua a 3º más de lo habitual, total que el vapor de agua a formado gotas en la parte baja del comedero que han escurrido hasta la cinta de doble cara que se ha juntado en un charquito hasta el borde del agujero de la entrada de comida (puff, espero haberme explicado )
En resumen, los pequeños y lindos colémbolos que suelen pasear por debajo de la tapa han aprovechado la humedad para subir y ¡tachan! descubrir la comida.
Todo esto ocurre de una semana para otra, desaparece toda la comida y se aprecian los restos y las hojuelas agujereadas :
En plena acción:
Podeis imaginaros que a cada giro del comedero lo que soltaba era polvillo y unos cuantos bichos que se zampaban los peces a toda velocidad