#1
12-08-2022, 12:20 PM
Buenas.
Hace más de un mes que no escribo por aquí, entre las vacaciones y la locura del curro he estado con poco tiempo. Tengo la ficha de mi acuario bastante abandonada y sin imágenes recientes.
Vengo sólo a explicar mi pequeña desgracia veraniega, que aunque no sea nada comparable con algunos casos que he leído últimamente, me ha dejado con un bajón importante.
Veréis, el 17 de marzo, un mes y medio después de la puesta en marcha del acuario, me apareció un alevín de corydora de unos cuantos milímetros de longitud. La pequeña Dora (que así la bautizamos con mi hija) fue creciendo y ya se comportaba como una más del grupo, aunque aún tenía la mitad del tamaño de sus compañeras.
Esta tarde me voy de vacaciones otra vez, los segundos 15 días, y ayer monté el alimentador automático, el depósito grande de agua de relleno, quité hojas sueltas de plantas e hice un cambio de agua generoso, de un 60%.
Antes de empezar el cambio de agua vi a Dora nadar con normalidad; empecé a llenar con agua nueva y cuando ya llevaba unos 15 litros añadidos miré la urna para asegurarme de que no se me estaba removiendo el fondo y allí la vi, quieta, panza arriba, sobre la arena del fondo. Estaba muerta.
Los demás peces, corydoras incluidas, estaban normales y siguen normales esta mañana. Las gambas japónicas también. No entiendo nada de lo que le ha pasado. La temperatura subió un grado, lo habitual en mis cambios en verano, y la composición del agua del cambio era la misma de siempre, osmosis/red en proporción 8:1 (con el anticloro necesario para el total de agua del cambio, añadido un cuarto de hora antes de empezar a rellenar al cubo de la mezcla).
Para explicarme una muerte tan fulminante sólo se me ocurre que fuera aspirada por la bomba que utilizo para el vaciado y que no me diera cuenta, o quizá le di un golpe al montar la bomba y la manguera que utilizo para sacar el agua. Si fue así, aún me jo*e más, ya que la causa fue mi falta de cuidado.
Pues nada, ya me he desahogado. Buenas vacaciones y suerte a la vuelta para todos.
Hace más de un mes que no escribo por aquí, entre las vacaciones y la locura del curro he estado con poco tiempo. Tengo la ficha de mi acuario bastante abandonada y sin imágenes recientes.
Vengo sólo a explicar mi pequeña desgracia veraniega, que aunque no sea nada comparable con algunos casos que he leído últimamente, me ha dejado con un bajón importante.
Veréis, el 17 de marzo, un mes y medio después de la puesta en marcha del acuario, me apareció un alevín de corydora de unos cuantos milímetros de longitud. La pequeña Dora (que así la bautizamos con mi hija) fue creciendo y ya se comportaba como una más del grupo, aunque aún tenía la mitad del tamaño de sus compañeras.
Esta tarde me voy de vacaciones otra vez, los segundos 15 días, y ayer monté el alimentador automático, el depósito grande de agua de relleno, quité hojas sueltas de plantas e hice un cambio de agua generoso, de un 60%.
Antes de empezar el cambio de agua vi a Dora nadar con normalidad; empecé a llenar con agua nueva y cuando ya llevaba unos 15 litros añadidos miré la urna para asegurarme de que no se me estaba removiendo el fondo y allí la vi, quieta, panza arriba, sobre la arena del fondo. Estaba muerta.
Los demás peces, corydoras incluidas, estaban normales y siguen normales esta mañana. Las gambas japónicas también. No entiendo nada de lo que le ha pasado. La temperatura subió un grado, lo habitual en mis cambios en verano, y la composición del agua del cambio era la misma de siempre, osmosis/red en proporción 8:1 (con el anticloro necesario para el total de agua del cambio, añadido un cuarto de hora antes de empezar a rellenar al cubo de la mezcla).
Para explicarme una muerte tan fulminante sólo se me ocurre que fuera aspirada por la bomba que utilizo para el vaciado y que no me diera cuenta, o quizá le di un golpe al montar la bomba y la manguera que utilizo para sacar el agua. Si fue así, aún me jo*e más, ya que la causa fue mi falta de cuidado.
Pues nada, ya me he desahogado. Buenas vacaciones y suerte a la vuelta para todos.