#1
16-05-2016, 08:31 PM
Hace un mes aproximadamente, alguno de los compañeros de mi ranchu, le arrancó sin querer a la hora de comer uno de sus ojos. El culpable no se delato
, pero mis sospechas recaen en el oranda más grande, ya que tiene mucha fuerza de succión y es del tamaño de mi mano.
Todo apunta que lo que sucedió fue que al echar la comida al acuario, parte de esta calló sobre el ranchu y alguno de ellos pico sobre el pez para comer, desgarrándole el ojo. Este pez tiene un problema crónico de vejiga natatoria que le impide nadar y le hace quedarse tumbado de lado.
Me ausenté no más de 10 segundos, y cuando volví a mirar el acuario, mi pobre pez estaba sin ojo y expulsando sangre sin parar, que se diluía rápidamente en el agua. Tenía el nervio óptico colgando de la cuenca pero sin el globo ocular y asomando otros trozos de carne que no conseguí identificar.
Rápidamente llené un tupper de 25l con agua del acuario, debido a que no tenía preparada agua declorada, e introduje al pez en el tupper.
La hemorragia del ranchu era muy abundante, y no se cortaba, la gran mayoría de la sangre la expulsaba a través del nervio óptico y en menor cantidad por otras zonas carnosas de la cuenca del ojo.
Como no disponía de ningún coagulante para poder cortar la hemorragia, me lancé a la desesperada y me dispuse a preparar un bol con agua del acuario.
Corté un trozo de gasa estéril y le apliqué un par de gotas de Betadine( povidona yodada), saqué al pez del tupper y sosteniéndolo con una mano le apliqué sobre la cuenca del ojo y las zonas carnosas que sobresalían con sumo cuidado la gasa empapada en betadine. Dejé unos segundos al ranchu sobre mi mano fuera del agua para que se secara el betadine, y lo "aclaré" en el bol de agua que había apartado, para limpiarlo del exceso de betadine antes de introducirle a su tupper hospital, y así evitar que pudiera tragárselo o entrarle en las branquias. Tras esto devolví al pez al tupper, después de un par de minutos la hemorragia seguía sin cortarse, así que procedí a volver a sacarle del agua y esta vez le apliqué directamente un chorro sobre los tejidos carnosos y la cuenca del ojo, y repetí el proceso de "aclarado".
Poco después de ser devuelto a su tupper, la hemorragia por fin se cortó.
Con toda la sangre que había perdido, creí que el pez no sobreviviría. La escena era dantesca, charcos de sangre acumulados por la base del tupper, y mi pobre pez con el nervio óptico colgando, el cual se le metía dentro de la boca al respirar.
Una vez cortada la hemorragia, retiré las placas de sangre que se habían acumulado en el tupper y puse un compresor de aire con la piedra difusora que más burbujas generaba.
Como no tenía por casa azul de metileno para evitar que la herida se infectara, saqué del botiquín Backtopur que contiene azul de metileno.
A continuación os dejo los compuestos de este medicamento:
-Acriflavina 209,7mg
-Azul de metileno 4,95mg
-Flenilglicol 0,6g
-Agua purificada ad 100ml
El medicamento indica echar 22 gotas por cada 20l, pero como yo no quería hacer un tratamiento como tal, sino desinfectar la zona y prevenir posibles infecciones u hongos, me la jugué un poco utilizando lo que tenía por casa, y para 25l eché 11 gotas.
El nervio óptico colgando de la cuenca del ojo no me daba buena espina, y estuve planteándome si debía de cortárselo con la ayuda de un mosquito y un bisturí o tijeras. Tenía un color rojo intenso, señal de que la arteria central de la retina o la vena central seguían recibiendo sangre. Así que decidí no cortar y observar durante las siguientes horas como evolucionaba.
Poco a poco el extremo del nervio iba tornando un color rosa claro y perdiendo la intensidad del rojo, después lo que antes era rosa tomaba un color blanco, y el resto del nervio desde el extremo al nacimiento iba apagando su color a un tono rosa-violáceo. Supuse que poco a poco el riego sanguíneo no llegaba a esa zona, y empezaban a morir los tejidos.
![[Imagen: R58vDPj.jpg]](https://i.imgur.com/R58vDPj.jpg)
Me decidí acostar al pez a eso de las 3 A.M y esperar a ver que me encontraba al día siguiente, y si me iba a tocar o no tener que cortar el nervio.
A la mañana siguiente el pez seguía vivo, con un ánimo estupendo y un apetito voraz. El nervio óptico por sus propios medios había desparecido casi por completo. Y el color de casi todos los tejidos que se apreciaban en la cuenca del ojo, tenían tonos más claros que la noche anterior.
Realicé un cambio de agua del 100% por agua nueva, y subí la dosis de medicamento a 13 gotas.
El tercer día realicé la misma operación de cambio de agua al 100% y volví añadir 13 gotas de Baktopur.
Al cuarto día volví a cambiar el 100% y suprimí el medicamento.
Desde el cuarto día los únicos cuidados especiales que ha recibido el ranchu, han sido cambios diarios del 100% del agua, para tener una calidad excelente y evitar posibles infecciones bacterianas u hongos. Y los resultados han sido más que favorables.
Aquí os dejo un vídeo con la evolución del ojo durante 13 días,hasta su completa cicatrización. Podréis ver como por si solas las zonas carnosas van desapareciendo con los días.
Aviso:
*Si eres sensible a ver animales heridos, o simplemente no puedes ver sangre o heridas, NO ABRAS el vídeo. No son muy escandalosas las imágenes, pero cada uno sabe hasta que punto es propenso a herir su sensibilidad con este tipo de imágenes.
*Si veis el vídeo desde un dispositivo móvil o tablet, no podréis ver el título que os indica que día del proceso es en cada parte del vídeo.
Un saludito
-Bersus-
, pero mis sospechas recaen en el oranda más grande, ya que tiene mucha fuerza de succión y es del tamaño de mi mano. Todo apunta que lo que sucedió fue que al echar la comida al acuario, parte de esta calló sobre el ranchu y alguno de ellos pico sobre el pez para comer, desgarrándole el ojo. Este pez tiene un problema crónico de vejiga natatoria que le impide nadar y le hace quedarse tumbado de lado.
Me ausenté no más de 10 segundos, y cuando volví a mirar el acuario, mi pobre pez estaba sin ojo y expulsando sangre sin parar, que se diluía rápidamente en el agua. Tenía el nervio óptico colgando de la cuenca pero sin el globo ocular y asomando otros trozos de carne que no conseguí identificar.
Rápidamente llené un tupper de 25l con agua del acuario, debido a que no tenía preparada agua declorada, e introduje al pez en el tupper.
La hemorragia del ranchu era muy abundante, y no se cortaba, la gran mayoría de la sangre la expulsaba a través del nervio óptico y en menor cantidad por otras zonas carnosas de la cuenca del ojo.
Como no disponía de ningún coagulante para poder cortar la hemorragia, me lancé a la desesperada y me dispuse a preparar un bol con agua del acuario.
Corté un trozo de gasa estéril y le apliqué un par de gotas de Betadine( povidona yodada), saqué al pez del tupper y sosteniéndolo con una mano le apliqué sobre la cuenca del ojo y las zonas carnosas que sobresalían con sumo cuidado la gasa empapada en betadine. Dejé unos segundos al ranchu sobre mi mano fuera del agua para que se secara el betadine, y lo "aclaré" en el bol de agua que había apartado, para limpiarlo del exceso de betadine antes de introducirle a su tupper hospital, y así evitar que pudiera tragárselo o entrarle en las branquias. Tras esto devolví al pez al tupper, después de un par de minutos la hemorragia seguía sin cortarse, así que procedí a volver a sacarle del agua y esta vez le apliqué directamente un chorro sobre los tejidos carnosos y la cuenca del ojo, y repetí el proceso de "aclarado".
Poco después de ser devuelto a su tupper, la hemorragia por fin se cortó.
Con toda la sangre que había perdido, creí que el pez no sobreviviría. La escena era dantesca, charcos de sangre acumulados por la base del tupper, y mi pobre pez con el nervio óptico colgando, el cual se le metía dentro de la boca al respirar.
Una vez cortada la hemorragia, retiré las placas de sangre que se habían acumulado en el tupper y puse un compresor de aire con la piedra difusora que más burbujas generaba.
Como no tenía por casa azul de metileno para evitar que la herida se infectara, saqué del botiquín Backtopur que contiene azul de metileno.
A continuación os dejo los compuestos de este medicamento:
-Acriflavina 209,7mg
-Azul de metileno 4,95mg
-Flenilglicol 0,6g
-Agua purificada ad 100ml
El medicamento indica echar 22 gotas por cada 20l, pero como yo no quería hacer un tratamiento como tal, sino desinfectar la zona y prevenir posibles infecciones u hongos, me la jugué un poco utilizando lo que tenía por casa, y para 25l eché 11 gotas.
El nervio óptico colgando de la cuenca del ojo no me daba buena espina, y estuve planteándome si debía de cortárselo con la ayuda de un mosquito y un bisturí o tijeras. Tenía un color rojo intenso, señal de que la arteria central de la retina o la vena central seguían recibiendo sangre. Así que decidí no cortar y observar durante las siguientes horas como evolucionaba.
Poco a poco el extremo del nervio iba tornando un color rosa claro y perdiendo la intensidad del rojo, después lo que antes era rosa tomaba un color blanco, y el resto del nervio desde el extremo al nacimiento iba apagando su color a un tono rosa-violáceo. Supuse que poco a poco el riego sanguíneo no llegaba a esa zona, y empezaban a morir los tejidos.
Me decidí acostar al pez a eso de las 3 A.M y esperar a ver que me encontraba al día siguiente, y si me iba a tocar o no tener que cortar el nervio.
A la mañana siguiente el pez seguía vivo, con un ánimo estupendo y un apetito voraz. El nervio óptico por sus propios medios había desparecido casi por completo. Y el color de casi todos los tejidos que se apreciaban en la cuenca del ojo, tenían tonos más claros que la noche anterior.
Realicé un cambio de agua del 100% por agua nueva, y subí la dosis de medicamento a 13 gotas.
El tercer día realicé la misma operación de cambio de agua al 100% y volví añadir 13 gotas de Baktopur.
Al cuarto día volví a cambiar el 100% y suprimí el medicamento.
Desde el cuarto día los únicos cuidados especiales que ha recibido el ranchu, han sido cambios diarios del 100% del agua, para tener una calidad excelente y evitar posibles infecciones bacterianas u hongos. Y los resultados han sido más que favorables.
Aquí os dejo un vídeo con la evolución del ojo durante 13 días,hasta su completa cicatrización. Podréis ver como por si solas las zonas carnosas van desapareciendo con los días.
Aviso:
*Si eres sensible a ver animales heridos, o simplemente no puedes ver sangre o heridas, NO ABRAS el vídeo. No son muy escandalosas las imágenes, pero cada uno sabe hasta que punto es propenso a herir su sensibilidad con este tipo de imágenes.
*Si veis el vídeo desde un dispositivo móvil o tablet, no podréis ver el título que os indica que día del proceso es en cada parte del vídeo.
Un saludito
-Bersus-
![[Imagen: GIF015.gif]](http://i950.photobucket.com/albums/ad343/elrinconcito/gifs/Aplausos/GIF015.gif)
Bravo........tranquilidad y sangre fría ante una emergencia. 
. Entre llorona y con ganas de vomitar, un cuadro de enfermera jajaja
jajaja
