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20-10-2016, 09:22 PM
(Última modificación: 20-10-2016, 09:35 PM por
antin.)
No se si esto seria aplicable aqui pero me gustaria dar un toque de optimismo al asunto... En cualquier caso me pongo a disposicion del moderador...
BIODEGRADACIÓN DE CRUDO DE PETROLEO EN TERRARIOS
Escalante Guzmán Rocío Milusca
CAPITULO 5
DISCUSIÓN
De manera similar a Arenas en 1999, quien aisló doscientas sesentaidos cepas bacterianas de agua y tierra procedentes de la refinería "La Pampilla", de las cuales 68% fueron gramnegativas, en el trabajo, también se obtuvo un elevado número de cepas bacterianas oleofílicas (cientoventinueve), aisladas de suelos procedentes de Trompeteros, Iquitos, de las cuales el 81.39% fueron gramnegativas. Por tanto, se confirma que existen bacterias capaces de metabolizar hidrocarburos. Arenas, aisló mayor cantidad de bacterias consumidoras de hidrocarburos, porque las muestras que evaluó procedían de una zona con mayor concentración de hidrocarburos. Atlas, en 1983, afirmó que la población de bacterias oleofílicas aumenta después de derrames de petróleo y es directamente proporcional a la concentración de hidrocarburos.
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Conclusiones
Se encontró además, que el 99.22% de cepas bacterianas presentaron actividad emulsificante, este resultado corrobora lo afirmado por Hayes y col., en 1986, quienes indicaron que muchos microorganismos sintetizan biosurfactantes y bioemulsificantes, que permiten asimilar los hidrocarburos. La actividad emulsificante y degradativa de las cepas bacterianas aisladas, fue menor a la obtenida por Arenas, debido a las características genéticas de las cepas bacterianas, así la mayor actividad degradativa alcanzada fue tres (3+), en cambio, Arenas, obtuvo una actividad degradativa de cinco (5+)
En la identificación taxonómica se verificó la existencia de especies del género Pseudomonas: Pseudomonas aeruginosa, Pseudomonas acidovorans, Pseudomonas mallei, Pseudomonas cepacia, Pseudomonas pseudomallei, especies identificadas también por otros investigadores, quienes afirman que los microorganismos del género Pseudomonas sp., tienen un rol importante en la degradación de petróleo, así Leahy y Colwell en 1990, indicaron que los microorganismos degradadores de hidrocarburos más importantes, tanto en aguas como en suelos son: Pseudomonas sp., Achromobacter, Acinetobacter, Alcaligenes, Arthrobacter, Bacillus, Flavobacterium y Nocardia, Rentería y Miranda, en 1998, encontraron cinco cultivos de mayor actividad biodegradativa: Micrococcus, Pseudomonas, Alcaligenes, Acinetobacter y Flavobacterium y Tantaleán y Altamirano, en 1998, encontraron un cultivo mixto de Pseudomonas sp. nativas que tuvieron la mayor capacidad para utilizar el petróleo diesel D2.
En cuanto a la biodegradación de crudo en terrarios, el consorcio bacteriano exógeno produjo mayor biodegradación en los suelos evaluados, debido a la numerosa población de bacterias oleofílicas y a la capacidad degradativa elevada que presentaba, con respecto al consorcio bacteriano nativo, el cual degradó en menor cantidad los hidrocarburos debido a que el suelo de cultivo en el cual se realizó el ensayo de biorremediación procedía de una zona que no había sido anteriormente contaminada con hidrocarburos, por tanto inicialmente, no presentaba bacterias oleofílicas, así según el primer recuento realizado en laboratorio, no existían bacterias oleofílicas en el suelo, sin embargo después de un mes de la adición intencional de crudo de petróleo al suelo, se encontró un aumento en la población bacteriana a 3.30 x 10 5 UFC/mL, esto indica que se estimuló el crecimiento de bacterias oleofílicas, al adicionar el crudo de petróleo, en cambio la población de bacterias exógenas fue disminuyendo progresivamente, a medida que los hidrocarburos eran degradados, la disminución de bacterias oleofílicas fue directamente proporcional a la disminución en la concentración de hidrocarburos, esto se atribuye a que cuanto menos sustrato tienen las bacterias hidrocarburoclásticas, estas se encuentran en menor cantidad. No se puede afirmar que el 55 % de degradación hallada en el control abiótico se deba a factores ambientales puesto que se encontró cierta cantidad de microorganismos debido a una contaminación, en cambio Belloso y col.,1998, en el control abiótico, lograron inhibir completamente la microbiota del suelo utilizando bicloruro de mercurio.
El porcentaje de biodegradación de hidrocarburos producido por el consorcio bacteriano exógeno a los treinta días fue 63.4%, porcentaje mayor al obtenido por Belloso y col. quienes lograron una degradación de 45% a los treinta días, esto debido a que inocularon una sola cepa bacteriana oleofílica, en cambio en el presente estudio se inoculó un consorcio bacteriano exógeno conformado por tres cepas bacterianas oleofílicas, también Belloso y col encontró menor reducción de hidrocarburos en el terrario donde se encontraban las bacterias nativas (12%) y en el control abiótico (8%) Sabirova en el 2000, obtuvo aún menor porcentaje de biodegradación (22%) a los treinta días, después de aplicar un consorcio bacteriano halotolerante para la biodegradación de hidrocarburos en suelos, esto se debe a que la salinidad inhibe la actividad microbiana en suelos, mientras que en el control abiótico encontró un proceso degradativo lento de 22% de degradación al cabo de ocho meses, esto reafirma la importancia que tienen los microorganismos en la biodegradación de crudo de petróleo en suelos así en la presente investigación, se encontró que los microorganismos oleofílicos participaron directamente en la variación de la concentración de hidrocarburos en los terrarios con un coeficiente estándar de 0.883 y una confiabilidad próxima al 100 %, Díaz y col. en 1999, evaluaron la biodegradación de hidrocarburos utilizando un consorcio microbiano de la rizósfera de Cyperus laxus Lam. en condiciones de laboratorio y encontraron una biodegradación del 62.28% a los treintaicuatro días, aunque el estudio no fue realizado a nivel de terrarios, el porcentaje de biodegradación fue similar al alcanzado en el presente trabajo, el cual fue 63.4 % a los treinta días.
La fertilidad del suelo de cultivo evaluado favoreció el proceso biodegradativo. Sirvins y Tramier en 1993, afirman que la tasa de eliminación del petróleo después de siete días, en la naturaleza aumenta a 62-70% e incluso 79% cuando se añade nutrientes.
A los noventa días del experimento, se alcanzó mayor porcentaje de biodegradación (92.5 %) que el encontrado a los cientochenta días (57%) por Dibble y Bartha en 1979, quienes evaluaron el efecto de los parámetros ambientales en la biodegradación del crudo de petróleo en suelos fértiles.
CONCLUSIONES
Se aislaron cientoventinueve cepas bacterianas capaces de degradar hidrocarburos, de las cuales, el 99.22% presentaron actividad emulsificante y el 97.67% presentaron actividad degradativa.
El porcentaje de biodegradación producido por el consorcio bacteriano exógeno (92.5%) fue mayor al del consorcio bacteriano nativo (60%) a los noventa días.
Los microorganismos oleofílicos influyeron significativamente en la biodegradación de crudo de petróleo en los terrarios con una confiabilidad próxima al 100 %.
A los noventa días, se logró biodegradar el 92.5 % de los hidrocarburos en el terrario que contenía el consorcio bacteriano exógeno conformado por Pseudomonas aeruginosa 4k-1, Serratia rubidae 6B9 y Bacillus sp.6Bh-1.
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Contenido
Descripción General
1. Introducción
2. Toxicologia Ambiental
3. Evaluación de Riesgos Ambientales
4. Restauración Ambiental
5. Prevención de la Contaminación
6. Anexo
7. Indice de Figuras y Tablas
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RESTAURACIÓN AMBIENTAL
4.3.1.2 Fitorestauración
Consiste en utilizar cultivos de plantas para eliminar tóxicos presentes en agua y suelo. Se han utilizado para eliminar iones metálicos, plaguicidas, disolventes, explosivos, derrames de hidrocarburos (tanto crudos como compuestos poliaromáticos) y lixiviados de basureros tóxicos.
Las plantas pueden fijar los tóxicos o bien pueden metabolizarlos tal como lo hacen los microorganismos en los procesos de biorestauración.
4.3.1.2.1 Fitoextracción
Es la captación de iones metálicos por las raíces de la planta y su acumulación en tallos y hojas. Hay plantas que absorben selectivamente grandes cantidades de metales acumulando en los tejidos concentraciones mucho más altas que las presentes en el suelo o en el agua. Este proceso se ha utilizado para eliminar hidrocarburos de agua y suelo con cultivos alfalfa, álamos, enebro.
En la zona contaminada se plantan las especies que se seleccionan. Cuando las plantas crecen se recolectan y se incineran. Las cenizas se pueden lavar para recuperar los metales o bien, pueden confinarse en vertederos de tóxicos, con la ventaja de que ocuparán un espacio mucho menor que el que se usaría si se desechara el suelo contaminado.
4.3.1.2.2 Rizofiltración
Es similar a la fitoextracción, pero en lugar de cultivar las plantas en el suelo, se cultivan en invernaderos por procesos hidropónicos. Las plantas se cultivan en tanques con agua contaminada y los tóxicos quedan fijados en sus raíces. A medida que las raíces se saturan del tóxico se van cortando y eliminando. Este método se probó satisfactoriamente para eliminar iones radioactivos en las lagunas contaminadas en el accidente de la planta nuclear de Chernobyl. Usaron plantas de girasol.
4.3.1.2.3 Fitodegradación
Es un proceso por medio del cual las plantas degradan compuestos orgánicos. Los compuestos son absorbidos y metabolizados. Muy frecuentemente los metabolitos que producen tienen actividad de fitohormonas (aceleran el crecimiento de las plantas). Se han encontrado plantas que degradan residuos de explosivos, disolventes clorados como el TCE, herbicidas, etc.
Las plantas también favorecen la degradación microbiológica en la rizósfera. La flora microbiana del suelo es más abundante en las cercanías de las raíces, por lo que los procesos similares a la biodegradación tienen lugar a una velocidad mayor que en el resto del suelo, sin necesidad de estimular artificialmente la actividad microbiana.
Figura 4.3.1.C.- Fito-restauración.
4.3.1.2.4 Bombeo biológico
Cuando las raíces de los árboles llegan hasta el manto friático absorben una gran cantidad de agua. Hay una variedad de álamo (Populus deltoides) que absorbe más de un metro cúbico de agua por día. Esta característica de los árboles se puede utilizar para impedir que las aguas superficiales contaminadas lleguen a los acuíferos que se usan para suministro de agua potable, o bien para que se prevenga que aguas contaminadas lleguen a sitios donde pudieran causar problemas.
4.3.1.2.5 Fitovolatilización
Cuando los árboles absorben agua contaminada con compuestos orgánicos volátiles, eliminan la gran mayoría del COV en la evotranspiración de las hojas. Los álamos transpiran aproximadamente el 90% del TCE que absorben. El resultado neto de este proceso es, el que los árboles transfieren a la atmósfera el TCE que se encuentra en el acuífero.
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