Yo te cuento mi experiencia, que no tiene que por qué desmentir lo que han comentado antes otros compañeros, y tú valoras.
Hace 2 o 3 meses me vi obligado a cambiar de urna (una pequeña fuga) y aproveché para ampliar de una de 81 litros a una de 128 litros. Reservé agua de los cambios anteriores y realicé todo el cambio en un finde y del tirón ya que la nueva urna iba donde la antigua.
Estos fueron los principios que mantuve:
- Cuanta más agua de la antigua urna mejor: fui reservándola en un contenedor de plástico de los de guardar la ropa debajo de la cama.
- Toda la decoración de uno va al otro: el sustrato, las plantas, las piedras y el tronco pasaron de uno a otro.
- Dado que hay que aumentar el sustrato, que sea el mismo: hice un sandwich con el mismo sustrato nutritivo debajo, el sustrato mezclado de la antigua urna y el mismo sustrato "inerte" nuevo encima.
- El filtro, con su carga filtrante se mantiene: en principio pensaba que el filtro que tenía sería suficiente.
Haciéndolo así:
- No hubo ninguna muerte.
- No detecté picos de NO2.
- Las plantas sufrieron un parón que aprovecharon las algas para coger fuerza.
Aún así cometí algunos errores (que me consten):
- Añadí un par de edlers macho justo el finde del cambio: a día de hoy siguen vivitos y coleando.
- Cambié 3/4 de los T5 de la pantalla: sustituí tres 6500k por un 4000k, un 6500 y un 10000k. Esto seguramente ayudó al parón de las plantas y proliferación de las algas.
- El filtro es insuficiente: aunque gracias a la madurez del acuario está tirando ya observé algún problema con acumulación de detritus en zonas del acuario y, siguiendo los consejos de este foro, pienso sustituirlo/ampliarlo en unas semanas.
Actualmente voy ganando batallas contra las algas (lo puedes ver
aquí) y sigo peleándome con el sistema de CO2 (de levadura) ya que se me queda corto para la nueva urna.
Esa es mi experiencia, pero estoy con Alvaro y Gwendal en que, en la medida de lo posible, es preferible ciclar la nueva urna "ayudándola" con lo que provenga de la antigua.